• Tiene 18 años y es alemán

Las prisas al volante nunca son buenas compañeras. Esta es la lección que ha aprendido un joven alemán de 18 años que ha perdido su carnet de conducir en tiempo récord por exceso de velocidad. Solo 49 minutos después de aprobar el examen, el conductor novel fue interceptado por un radar cuando circulaba a casi el doble de la velocidad permitida en la vía.

El joven no solo se ganó una multa de 200 euros, sino que también ha perdido la posibilidad de conducir durante cuatro semanas. Viajaba acompañado por cuatro amigos y en el momento de la sanción circulaba a 95 km/h en una zona con límite de 50 km/h.

La Policía Local de Märkischer Kreis (Alemania) baraja la posibilidad de que el joven estaba intentando impresionar a sus amigos demostrando su destreza al volante. Al final, lo que ha conseguido es quedarse sin carnet y el deber de tener que acudir a un curso de recuperación para poder volver a conducir. La misma Policía publicó en twitter la noticia: “Algunas cosas duran para siempre… A algunos ni siquiera le duran una hora”.

Si esta situación se hubiese dado en nuestro país, al chico se le habría castigado con una sanción más dura, ya que cuando se aprueba el examen el recién estrenado conductor todavía no dispone de la acreditación administrativa para poder circular legalmente.